La adaptación del equipamiento de la Coma Cros de Salt propuesta en este proyecto trata de que todas las actividades del centro se dispongan alrededor de la sala de artes escénicas, esto se lleva a cabo con una doble piel perimetral. Esta piel da sentido a la polivalencia de la sala, la cara exterior es compacta y permite aislarse del resto y la cara interior, más ligera, compuesta por pasarelas y paneles es la que permite la versatilidad, ya que da la posibilidad de corregir la acústica según necesidades y abre un abanico de recursos escénicos en cuanto a iluminación, sonido y movilidad. La disposición transversal de la sala nos permite dar salida directa al exterior, ideal para poder acceder por una gran apertura a la sala e, incluso, la posibilidad puntual de crear algún espectáculo al aire libre y aumentar el aforo de público. Esta situación permite colocar los almacenes de uso a un lado y los camerinos al otro, dejando el acceso de público desde el vestíbulo por debajo de los camerinos, la circulación se cierra por el lado que da al pasaje interior, que se deja como paso interno y control de sala en la primera planta, y en planta baja como acceso de evacuación de público. Los camerinos se colocan en una situación central, entre las salas de ensayo, para una mejor eficacia, en la planta altillo y primera. Dejando la planta baja libre para poder acceder a la sala grande desde el vestíbulo. La conexión de todos los espacios dibuja una espina de pescado que nos portaal núcleo de accesos existente, que comunica con la edificación rehabilitada.
Las premisas a la hora de diseñar este proyecto han sido: la integración del funcionamiento del complejo Coma Cros optimizando esfuerzos, compatibilizar los diferentes espacios para que puedan funcionar sin limitaciones técnicas, agilidad y funcionalidad, previsión de futuras ampliaciones y adecuaciones técnicas y, por último, economía de recursos estudiante un funcionamiento del centro con el mínimo de personal para la máxima eficacia en tiempo y trabajo.